Sobre el Día de Europa
9 de mayo de 2009, Alba de Tormes, Salamanca
Felipe González de Canales y López-Obrero
Presidente del Instituto de Desarrollo Comunitario-IDC, Vicepresidente de la Red Internacional -Rurality-Environment-Dévelopment – RED y Secretario General de la Red Estatal de Desarrollo Rural-REDER
Quiero felicitar efusivamente al Ayuntamiento de Alba de Tormes y a su alcaldesa, Dña. María Concepción Míguelez Simón, en este emotivo acto; así como a D. Alfonso Fernández Mañueco, consejero de Interior y Justicia de la Junta de Castilla y León, a la presidenta de la Diputación de Salamanca, Dña. Isabel Jiménez García, a el ex director de la Oficina de la Unión Europea en España, D. José Luís González Vallvé, al presidente de la Federación Regional de Municipios y Provincias, D. Miguel Ángel García Nieto; al resto de autoridades, alcaldes, miembros del idc, de los Grupos de Acción Local, amigos y ciudadanos congregados en el día de Europa. A todos quiero manifestaros mi agradecimiento por la celebración de este día de Europa en el que nos habéis acompañado en la presentación del “Centro de información Europe Direct para el medio rural de Castilla y León”.
Me congratula la posibilidad de compartir hoy con ustedes una serie de reflexiones sobre un tema de tanta trascendencia social, política y económica como es el que nos ocupa: la construcción de la Unión Europea, que hoy asocia a 27 países y que ha demostrado en esta crisis, ser un baluarte frente a los que están fuera de la zona euro.
Nuestra Europa se sitúa desde hace años en primera línea en el ranking mundial de exportación e importación de alimentos y estamos en condiciones de ser parte activa en la solución de la grave amenaza por la falta de alimentos que sufren más de 1000 millones de desnutridos graves. Al tiempo que la U.E., gracias a sus agricultores puede asegurar que no le van a faltar alimentos, y estos de calidad y seguros. Por todo ello, creemos que estamos a las puertas de un reforzamiento de la PAC, en base al valor estratégico de los alimentos. Precisamente ahora que culmina un ciclo de desmantelamiento del I pilar de la PAC, ayudas directas a empresarios agrarios.
Muy pocos ciudadanos europeos saben que el 9 de mayo de 1950 nacía la Europa comunitaria, en un momento -es importante recordarlo- en el que la amenaza de una tercera guerra mundial se cernía sobre Europa. En una época en los que se aplastan los intentos democratizadores de Hungría y la llamada “primavera de Praga” en Checoslovaquia. En este negro panorama, sólo tuvo éxito el proceso democratizador en Austria, tras la retirada de las potencias vencedoras.
Como decíamos, el 9 de Mayo de 1950, en París, se convocó a la prensa a las 6 de la tarde en el Salón del Reloj del Ministerio de Asuntos Exteriores en el Quai d’Orsay porque se iba a hacer pública una “comunicación de la mayor importancia”. Las primeras líneas de la Declaración del 9 de mayo de 1950, redactada por Jean Monnet y comentada y leída ante la prensa por Robert Schuman, Ministro francés de Asuntos Exteriores, expresan claramente la ambiciosa magnitud de la propuesta de crear un espacio democrático de entendimiento, de paz y de prosperidad. La mejor respuesta a los enfrentamientos seculares de los pueblos de Europa, que el Tratado de Roma de 1957 consolidó con la firma de los seis primeros países: Alemania, Bélgica Francia, Holanda, Italia y Luxemburgo, al constituir la Comunidad Económica Europea. Proceso que hoy engloba a 27 países y se negocian nuevas ampliaciones como: Croacia, Macedonia, Turquía…
Desde entonces el 9 de mayo se ha convertido en el símbolo europeo (Día de Europa) que, junto con la bandera, el himno, el lema y la moneda única (el euro) identifican la entidad política de la Unión Europea.
En este contexto ambicioso de construcción europea surge la iniciativa innovadora y creativa de “Europe Direct”, con el objetivo de acercar al gran público de los territorios rurales, por medio de la creación de un servicio a los ciudadanos de información, todos los aspectos relacionados con la U.E. AL tiempo que contribuye a crear una estructura que ofrezca a los agentes políticos, sociales y profesionales y todos los habitantes del medio rural un vínculo de comunicación directo, flexible y eficaz con la realidad europea, coordinado con la acción de “Europe Direct del medio rural”.
Reitero una vez más mi agradecimiento por la importancia que tiene para los municipios rurales de Castilla Y León este modesto punto de ignición e información que constituye esta oficina de la U.E. concedida al Instituto de Desarrollo Comunitario, que a su vez supone la cuarta que se nos aprueba en el ámbito nacional. Un objetivo ambicioso, planteado ante la necesidad de estimular el debate y la participación; orientar y asesorar a los ciudadanos en el uso de la información y fuentes de documentación adecuadas a sus intereses o bien la difusión sobre los objetivos, las políticas y los programas de la Unión y eventos tan importantes para nuestro futuro, como el nuevo marco constitucional europeo y la configuración del nuevo parlamento, cuyas elecciones se celebran el 7 de junio próximo y en las que os invito a participar, haciendo futuro del que tan buenos resultados hemos obtenido en Castilla y León.
Otra gran coincidencia en esta nueva andadura europea es la celebración por parte del IDC del 25 aniversario de su fundación. En estos 25 años el IDC cuenta con una larga trayectoria de acciones encaminadas a apoyar y promover todo lo que redunde en unas mejores condiciones de vida y empleo del medio rural, preparando a los actores locales y sus técnicos –ADL-, como impulsando la conformación de asociaciones que mejore el tejido económico y social a través de una verdadera gobernanza; base de los acuerdos y concertaciones con las administraciones, UE, Estado, CCAA para desarrollar una adecuada gestión y ordenación de los espacios rurales, garantizando el protagonismo real de los habitantes de los territorios y optimizando sus esfuerzos.
El carácter innovador, de investigación y de cooperación han acompañado al IDC a los largo de estos 25 años y le ha impulsado siempre a afrontar nuevos retos en favor de los territorios rurales a través del asesoramiento y la cooperación con otras instituciones tanto públicas como privadas.
No quiero finalizar mi intervención sin reconocer públicamente que nuestro trabajo no hubiera sido posible sin el concurso y la colaboración de los numerosísimos alcaldes de las poblaciones rurales, que siempre y más allá de sus afiliaciones políticas, han supuesto para nosotros los verdaderos motores del desarrollo local de sus propios municipios.
En nombre del IDC y en el mío propio como presidente, muchas gracias por su presencia en el día de Europa, que hoy contribuimos unos y otros a sentirnos ciudadanos y artífices de ese proyecto común que llamamos Unión Europea de la que nos sentimos orgullosos y convencidos de que la gran variedad de nuestros pueblos gozarán de un futuro mejor.
HOMENAJE A LA BANDERA
Con este acto a la bandera y con ella a los distintos símbolos que identifican hoy día a la Unión Europea, queremos hacer votos por las raíces cristianas de nuestra Europa, reflejadas en las estrellas de la bandera que, su autor el pintor Arsène Heitz de Estrasburgo afirmó haber basado su diseño en la corona de la Medalla Milagrosa situada en la Iglesia parisina Rue Du Bac.
En un momento de duda sobre las soluciones a la crisis económica global, que tiene mucho que ver con una gran crisis de valores y de principios éticos y cuya solución habrá que buscarla en la honradez, en el trabajo bien hecho, en la excelencia en la enseñanza y en la honestidad, tanto de los gestores públicos como privados, valores sobre los que se asentó nuestra Unión y radica el éxito de la Europa de los pueblos y de las naciones.